Los abogado piden que se anule la sentencia y la nulidad absoluta del proceso.
EL SALVADOR.- El pasado 24 de junio de 2024, los abogados defensores de Norman Quijano apelaron la condena de 13 años y cuatro meses de cárcel impuesta por la Cámara Segunda de Penal de la Primera Sección del Centro de San Salvador y piden que se anule la sentencia y la nulidad absoluta del proceso.
«En el motivo de fondo hemos alegado que no existe ni el delito de agrupación ilícitas ni tampoco el de fraude electoral, hemos expuesto que lo dicho por Norman Quijano en los audios y transcripción de audios fue una cosa totalmente distinta a la intención de agruparse ilícitamente para cometer delitos y mucho menos se pidió el voto a cambio de dinero o de beneficios», afirmó uno de los abogados defensores de Quijano, quien omitió su nombre y quien fue consultado por otro medio nacional.
Ahora, la apelación será estudiada por la Sala de lo Penal de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), quien decidirá si anula la sentencia condenatoria contra Quijano.
El pasado martes 16 de abril de 2024, el excandidato presidencial de ARENA, y actual diputado del Parlamento Centroamericano (PARLACEN) fue condenado por negociar con pandillas votos a su favor en las presidenciales de 2014. También lo ha inhabilitaron para ejercer el cargo que tenía. En concreto, los delitos atribuidos son agrupaciones ilícitas y fraude electoral.
La acusación de la Fiscalía General de la República (FGR) indica sobre las negociaciones de Quijano con los cabecillas de las pandillas Mara Salvatrucha (MS-13) y Barrio 18 para que le ayudaran a ganar la elección presidencial, en la que finalmente ganó el excomandante guerrillero, Salvador Sánchez Cerén, del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN).
La FGR informó que logró demostrar que Quijano prometió, entre otras cosas, beneficios económicos, reducir el nivel de operatividad de la policía contra las pandillas y programas de reinserción a favor de sus integrantes.
Luego, ARENA expulsó a Norman Quijano por negociar con pandillas a cambio de votos durante las elecciones presidenciales de 2014.