Cárdenas Guillén se declaró culpable de cinco delitos graves, entre ellos conspiración para poseer drogas con la intención de distribuirlas, conspiración para blanquear instrumentos monetarios y amenaza de agresión y asesinato de agentes federales.
ESTADOS UNIDOS.- El Gobierno del demócrata Joe Biden tiene previsto extraditar en las próximas horas a México a Osiel Cárdenas Guillén, exlíder del Cártel del Golfo, para que sea juzgado allí, según indicó el pasado viernes un oficial estadounidense a NBC News.
Cárdenas Guillén, fundador de una de las organizaciones criminales más violentas de la historia de México, salió el viernes de su prisión federal tras cumplir 14 años de cárcel de una condena de 25 años por cargos que incluían amenazas a agentes federales. El exlíder del Cártel del Golfo creó además los Zetas, una banda criminal derivada formada por antiguos comandos militares que se hizo conocida por participar en torturas, decapitaciones y asesinatos indiscriminados.
Tras su excarcelación en Terre Haute (Indiana), pasó a custodia del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, en inglés), a la espera de ser extraditado a México, donde se le requiere por cargos criminales.
Cárdenas Guillén fue condenado a 25 años en una prisión federal sin libertad condicional en 2010. El Departamento de Justicia dijo que “supervisaba un vasto imperio de narcotráfico responsable de la importación de miles de kilogramos de cocaína y marihuana a Estados Unidos desde México” y que “utilizaba la violencia y la intimidació para promover los objetivos de su empresa criminal”.
En mayo de 1999, según informó el Departamento de Justicia en un comunicado de prensa de 2010, Cárdenas Guillén amenazó de muerte a un agente del sheriff del condado de Cameron, Texas, que trabajaba de incógnito con el ICE, después de que el oficial se negara a entregar un cargamento de casi 1,000 kilos de marihuana.
En noviembre de 1999, según el Departamento de Justicia, él y un grupo de sus hombres rodearon a un agente de la Administración para el Control de Drogas y a un agente del FBI en México y los amenazaron a punta de pistola, y les avisaron que no regresaran.
Cárdenas Guillén se declaró culpable de cinco delitos graves, entre ellos conspiración para poseer drogas con la intención de distribuirlas, conspiración para blanquear instrumentos monetarios y amenaza de agresión y asesinato de agentes federales.
Los expertos afirman que dirigió el Cártel del Golfo desde 1997 hasta 2003, cuando fue capturado por las fuerzas de seguridad mexicanas y finalmente extraditado a Estados Unidos. Comenzó a reunir a los Zetas en 1997 como una fuerza de seguridad del Cártel del Golfo, pero el grupo se separó después de que Estados Unidos lo detuvo.
La agencia de noticias Reuters, informó de que en 2012 los Zetas se habían convertido en una fuerza de 10,000 hombres armados que ocupaban una posición dominante en el tráfico transfronterizo de drogas, después de cometer algunas de las peores atrocidades en la historia de la guerra contra las drogas en México.
Los Zetas acabaron escindiéndose a mediados de la década de 2010, así lo informó Telemundo.