‘The Guardian’ y ‘The Telegraph’ revelaron que la Premier y la Federación inglesa (FA) estudian una serie de «pagos ocultos» realizados por Roman Abramovich que violan el ‘fair play’ financiero.
Al parecer, el expropietario ‘blue’ habría utilizado compañías ‘offshore’ [con ventajas fiscales] para «realizar transacciones por valor de decenas de millones de libras en beneficio del club».
Las infracciones fueron denunciadas por la nueva propiedad, con Todd Boehly a la cabeza. Ahora el ‘balón’ está en el ‘tejado’ de la Premier y de la propia FA, que, en caso de encontrar evidencias, podría sancionar al Chelsea con la pérdida de puntos.