El Salvador ha presentado una leve caída en la Canasta Básica de Alimentos (CBA).
EL SALVADOR.- La Red de Sistemas de Alerta Temprana contra la Hambruna (FEWS NET, por sus siglas en inglés) establecida por la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) en 1985, advirtió que la temporada anual de escasez de alimentos, que este año se extenderá un mes, se acerca a su pico.
Lo anterior, según la institución, implica una «agudización» de los factores estacionales que influyen en el «deterioro» de la seguridad alimentaria de los hogares más pobres en la región, es decir, para los agricultores de subsistencia en áreas del Corredor Seco y en el norte de Honduras.
Los habitantes de esta región, han recurrido a estrategias de «respuesta negativas», como la reducción de gastos no alimentarios esenciales, como la salud y la educación, y modificaciones en la cantidad de alimentos consumidos, eso, para compensar una baja estacional en su disponibilidad de alimentos, que «este año ha sido peor a raíz de las pérdidas agrícolas ocurridas durante 2023», indicó FEWS NET.
Por lo tanto, «hasta la cosecha de primera en septiembre, este grupo poblacional continuará experimentando condiciones de crisis. El resto de los hogares pobres rurales en la región se clasificará en inseguridad alimentaria acentuada», adelantó FEWS NET.
Prevén que los hogares más pobres muestren condiciones de inseguridad alimentaria acentuada a partir de octubre y hasta enero 2025
El déficit de humedad afectó el inicio de la temporada de primera, atrasando las siembras aproximadamente un mes.
Sin embargo, con el aumento en los acumulados de lluvia desde junio, estos se han reducido considerablemente, permitiendo el desarrollo de los cultivos de granos básicos, remarcó la Red de Sistemas de Alerta Temprana.
No obstante, la continuidad de temperaturas anormalmente altas han ocasionado una mayor incidencia de plagas y enfermedades, que no representa daños significativos, «pero sí ha implicado mayores gastos por parte de los agricultores que tienen una menor capacidad de inversión, a causa de los shocks consecutivos en años anteriores», explicaron.
Ahora bien, debido a la transición del fenómeno de la Niña, se espera continúen las condiciones cálidas y la irregularidad en las precipitaciones; y de acumulados de lluvia por arriba del promedio hasta enero 2025.
En ese contexto, «se espera que la producción de subsistencia de primera sea ligeramente menor al promedio, especialmente en áreas de ladera, donde la saturación del suelo provoca deslizamientos de tierra, y en las zonas propensas a inundaciones», previó la institución.
Para la cosecha postrera, las condiciones climáticas serán similares, lo que podría suponer mayor riesgo para la producción de frijol, que es de mayor relevancia durante este ciclo, y un aumento en los costos de producción, pronosticó FEWS NET.
No obstante, los cultivos comerciales en ambos ciclos estarán dentro de los márgenes del promedio en los tres países, así lo ha previsto la institución de alerta temprana.
«Con la salida de las cosechas de primera y postrera, se espera que la disponibilidad de alimentos en los hogares productores aumente respecto a los meses anteriores y al escenario observado en 2023», afirmaron.
En consecuencia, «se espera que los hogares más pobres muestren condiciones de inseguridad alimentaria acentuada a partir de octubre y hasta enero 2025, especialmente debido a que el aumento estacional en las opciones de empleo en sectores como el agrícola, turístico y comercial mejorarán el acceso a alimentos», concluyó FEWS NET.
El Salvador presentó una leve caída en la CBA rural
En el caso de la inflación alimentaria, FEWS NET aseguró que continúa mostrando aumentos intermensuales, con El Salvador reportando un aumento del 1.3 por ciento respecto al mes previo, y Nicaragua, con un 1.4 por ciento en el mismo período.
«Al analizar la Canasta Básica de Alimentos (CBA) se puede observar que, efectivamente, los costos que están muy por encima del promedio quinquenal y al valor reportado en 2023, excepto para el caso de la CBA rural en El Salvador, donde sí es evidente una leve caída», escribió la institución en su informe.
En Nicaragua, la variación acumulada para lo que va del año tuvo un aumento de casi 8 % y en Honduras el alza fue de 5 %. En el caso de El Salvador, la CBA urbana reportó un aumento del 2 %, mientras que la rural reportó una disminución cercana al 4 %.
«El factor principal detrás de los precios elevados es el efecto residual de las alzas generalizadas ocurridas en 2022, a consecuencia del conflicto Ucrania-Rusia, cuando la CBA aumentó cerca del diez por ciento en Nicaragua, y hasta 14.4 por ciento en el área rural de El Salvador», explicó la institución de alerta temprana.
«Estos incrementos acumulados significan una caída significativa en la capacidad adquisitiva de los hogares más pobres, que no han visto un aumento proporcional en sus ingresos. Hasta enero 2025, se reportarán bajas estacionales, especialmente en los granos básicos, pero no se prevé que el precio de los alimentos disminuya significativamente», advirtió FEWS NET.
Actividades comerciales y turísticas de fin de año apoyarán los ingresos de los hogares urbanos
En cuanto a las opciones de generación de ingresos, se encuentran estacionalmente bajas hasta la salida de la cosecha de cultivos comerciales, como el café y la caña de azúcar, a partir de octubre, «favoreciendo un incremento en los ingresos de los hogares jornaleros». En ese sentido, este año, se espera que los factores climáticos eviten una mejora en los rendimientos del café, por lo que el pago no será mejor al de los años anteriores, indicaron.
No obstante, «las actividades comerciales y turísticas de fin de año apoyarán los ingresos de los hogares urbanos. Las remesas continuarán apoyando la alimentación y otras necesidades básicas, compensando la caída en la capacidad adquisitiva en los hogares receptores. Se espera que estas se mantengan oscilando en valores cercanos o ligeramente mayores a los reportados el año previo. Nicaragua ha reportado un mayor crecimiento en los últimos meses, pero el endurecimiento en las políticas migratorias en Estados Unidos puede ralentizar esa tendencia», concluyó FEWS NET.