La fase 3 del Plan Económico pretende la modernización del Puerto de Acajutla, la activación del Puerto de La Unión por medio de la empresa turca, Yilport Inc. con una fuerte inversión privada de $1,615 millones.
EL SALVADOR.- La titular del Ministerio de Economía, María Luisa Hayem asegura que el proyecto de renovación y activación de los puertos de Acajutla y La Unión, que forman parte de la tercera fase del Plan Económico denominado «Logística» tendrán un «impacto catalizador» en el crecimiento económico del país.
De acuerdo con la ministra Hayem, dicho proyecto permitirá que El Salvador registre un crecimiento de las exportaciones, de las importaciones que por consiguiente generarán un aumento de la inversión extranjera y de nuevas fuentes de empleo.
«El hecho que las mercancías puedan salir y entrar de una manera ágil, ya sea insumos o bienes eso va a permitir a que haya más proyectos de logística, que empresas despachen más ágil, poder buscar nuevos mercados y vender al cliente con el que trabajan. En ese sentido, definitivamente como las otras medidas ya anunciadas del plan económico, este proyecto tendrá un impacto catalizador en el crecimiento económico de nuestro país en el cual se beneficien nuestra población», argumentó Hayem, en una entrevista televisiva.
La fase 3 del Plan Económico pretende la modernización del Puerto de Acajutla, la activación del Puerto de La Unión por medio de la empresa turca, Yilport Inc. con una fuerte inversión privada de $1,615 millones y que será bajo un formato mixto entre la empresa turca y el Estado.
La ministra señaló que el mejoramientos de ambos puertos permitirán el crecimiento sostenido de El Salvador. “Percibimos un compromiso del Gobierno para crear un excelente clima de negocios, con condiciones que requieren desde las microempresas hasta las grandes empresas”, sostuvo.
Asimismo, Hayem aseveró que una de las metas trazadas en este nuevo proyecto es poder convertir a El Salvador en uno de los países de América Latina con un optimo manejo de mercancías y de materia que facilite el desarrollo del comercio con la reducción de costos.
«Se tendrá mayor competitividad para los sectores y seremos más atractivos para los inversores extranjeros, generando más empleos y mejor calidad de vida», recalcó la ministra de Economía.
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