Los plátanos, un caso especial.
ESPAÑA.- Cuando compramos fruta, lo lógico es almacenarla en la nevera o en la despensa. Sin embargo, al parecer, existen otros métodos para almacenarla y retrasar su madurez. Así conseguimos que la fruta nos dure un poco más y podamos ‘congelar’ el tiempo de los alimentos. Este hecho, hace que evitemos el desperdicio de las frutas y podamos alargar su uso en el tiempo.
Procedimiento tras comprar la fruta
Aunque lo solemos hacer de manera mecánica, es importante que este proceso se realice de manera consciente y teniendo en cuenta la importancia de cuidar y tratar de una manera correcta las frutas que nos hemos comprado. Para ello, lo ideal es:
- En caso de que la fruta tenga plástico o se encuentre en una bolsa de este tipo, si mantenemos esa bolsa cerrada podría afectar al estado de las frutas.
- Debemos meter la fruta en un lugar fresco y seco. Cuanta menos luz le dé a las frutas menos se estropearán.
- Si el único lugar del que dispones es la nevera, deberás buscar el lugar menos frío.
- Separar la fruta madura de la que está aún verde para que no se transmita ese estado de una a otra.
- No almacenar la fruta cortada porque tiende a ponerse mala. En ese caso es mejor consumirla lo antes posible.
Los plátanos, un caso especial
En el caso de los plátanos cambia un poco la manera en la que los debemos almacenar. Está contraindicado dejarlos al aire libre y guardarlos en la nevera. Los expertos, realmente, recomiendan envolver los plátanos en papel de periódico y dejarlos en un lugar fresco y seco.
En caso de no taparlos de esta manera, estaríamos exponiendo la fruta a una maduración más rápida debido al etileno. Por otro lado, en el frigorífico, los plátanos pierden textura y sabor.