El presidente electo de Ecuador, Daniel Noboa, recibió este martes un balance del gobierno saliente sobre la situación de crimen organizado y violencia ligada al narcotráfico que azota al país.
Noboa y el actual mandatario, el conservador Guillermo Lasso, analizaron «los riesgos y amenazas que afronta el Ecuador en el contexto del crecimiento del crimen organizado transnacional», de acuerdo a un boletín de presidencia.
El encuentro en Quito se dio en el marco de una reunión con el alto Consejo de Seguridad Pública, integrado por titulares de todos los poderes del Estado y mandos militares y policiales.
La cita se desarrolló a puerta cerrada en la sede de gobierno, adonde concurrió Noboa sin la compañía de colaboradores.
Ecuador enfrenta una guerra por el poder del narcotráfico entre numerosas bandas vinculadas con carteles mexicanos y colombianos.
Las organizaciones convirtieron las cárceles en centros de operaciones y campo de batalla, con choques que dejan más de 460 reclusos muertos desde febrero de 2021.
Las disputas se extienden a las calles, donde se han encontrado cuerpos desmembrados y colgados de puentes al estilo del narco mexicano. Entre 2018 y 2022, los homicidios se cuadruplicaron, hasta alcanzar el récord de 26 por cada 100.000 habitantes.
«El devolver la seguridad a la población es una de las prioridades de Daniel Noboa Azín para su mandato», señaló su equipo de prensa previo a la reunión.
El empresario autoproclamado de centroizquierda y apoyado por fuerzas de derecha será posesionado por la Asamblea Nacional el 23 de noviembre, convirtiéndose a sus 35 años en el presidente más joven de la historia de Ecuador.
Dos días después de ganar el balotaje del 15 de octubre, Noboa se reunió con Lasso en el Palacio de Carondelet, sede del gobierno.
En esa ocasión pidió un informe sobre la seguridad nacional con «el objetivo es comenzar a restituir la paz», según indicó.
Ubicado entre Colombia y Perú, los mayores productores de cocaína del mundo, Ecuador dejó de ser un punto de tránsito de la droga que se exporta principalmente a Estados Unidos y Europa y se convirtió en un actor que participa directamente en el tráfico.
En dos años y medio de gobierno de Lasso, Ecuador ha decomisado 526 toneladas de drogas.
Noboa gobernará hasta 2025 cuando complete el actual período de cuatro años de Lasso, quien disolvió en mayo el opositor Congreso y dio paso a elecciones anticipadas.
