La Defensoría del Consumidor se convierte en la primera institución pública de protección al consumidor en la región centroamericana que utilizará delegados encubiertos para ejercer la vigilancia de precios injustificados.
EL SALVADOR.- La Defensoría del Consumidor (DC) desplegó este viernes a delegados inspectores encubiertos para ejercer la vigilancia y monitoreo de los mercados de bienes, productos y servicios en El Salvador, a fin de combatir especulación e incremento injustificado de precios.
«La Defensoría del Consumidor, esta mañana, se ha activado en los diferentes ámbitos del comercio con las inspecciones bajo la modalidad de delegado encubierto», informó el presidente de dicha entidad, Ricardo Salazar.
El presidente de la Defensoría señaló que dichas acciones forman parte de la nueva disposición se sustenta en la recientes reformas a la Ley de Protección al Consumidor, que están vigentes a partir del pasado 3 de julio.
«Las reformas en el artículo 101 A establecen que la Defensoría del Consumidor podrá, a partir de representantes de nuestra institución como delegados encubiertos, detectar incumplimientos en diferentes ámbitos del mercado», detalló.
Asimismo, Salazar explicó que se incluyen malas prácticas como la publicidad engañosa, la falta de información en promociones y ofertas; asimismo, el incumplimiento de las condiciones de oferta por parte de los comercios.
«A través de esta nueva modalidad de inspección, vamos a detectar el aumento de precios de bienes o servicios por compra con tarjeta de crédito o diferencias por compra en efectivo”, dijo el funcionario.
La presidente destacó que la Defensoría del Consumidor se convierte en la primera institución pública de protección al consumidor en la región centroamericana que utilizará delegados encubiertos para ejercer la vigilancia de bienes, productos y servicios en El Salvador.
«Es importante mencionar que esta nueva disposición se articula con la estrategia de trabajo de la Defensoría del Consumidor que busca prevenir cualquier tipo de práctica comercial que busque lesionar el bolsillo y la economía familiar de la población», expuso Salazar.
En ese sentido, las multas a las que se exponen los comercios, que son detectados con el mecanismo de delegado encubierto, pueden ir desde los 50 a 500 salarios mínimos.
