El insaciable afán de Novak Djokovic por seguir ganando, puede haberle jugado una mala pasada a tan solo diez días para que empiece el Open de Australia.
Tras verse obligado a renunciar al partido de dobles mixtos ante la República Checa, que decidia el futuro de su equipo en la competición, el serbio decidió competir en los cuartos de final ante Australia y saltó a jugar en el primer punto de la eliminatoria ante De Miñaur.
Una decisión que ha acabado siendo catastrófica y que le puede suponer un disgusto mayor. Mermado nuevamente por las molestias en la muñeca derecha que ya evidenció ante Lehecka, Djokovic sucumbió en dos sets ante el tenista australiano (6-4 / 6-4), dejando claras muestras de que la lesión puede ser más importante de lo pensado.
«Cuanto más juego más me duele» explicaba el serbio a uno de los fisios que tuvo que salir a atenderle durante uno de los descansos del partido. Pese a ello, Djokovic asegura estar preparado para afrontar el reto de volver a recuperarse y ganar su undécimo título en Melboure.
«He estado en este tipo de situación muchas veces y sé lo que tengo que hacer junto con mi equipo para prepararme. De los últimos tres, en dos me lesioné justo antes del Abierto de Australia y logré ganar dos, así que espero no resultar herido esta vez» declarró tras el partido.